Son muchas las cosas que hay que mirar antes de comprar un coche, no sólo es vemos un coche que nos gusta, negociamos el precio y lo compramos. No, esto es algo más complejo, la verdad es que son muchos los que acaban engañados por personas que venden coches en los que han metido la mano para que parezca que tienen menos kilómetros y así poder venderlos por más dinero, los problemas económicos hacen que muchas personas se dediquen a engañar y a estafar a las personas que queremos adquirir un coche.
Lo mejor es ir a sitios de confianza, déjate asesorar por personas que saben de lo que hablan, busca lugares en los que se vaya de cara para evitar malas jugadas y engaños. Si lo que buscas es un coche de segunda mano asegúrate de que su precio es el correcto, no pagues de más. Para esto sólo tienes que buscar un mecánico que te diga en qué condiciones está el vehículo que quieres comprar. Para mayor seguridad busca un lugar en el que poder comprar los recambios que necesite en un futuro el coche en cuestión, un lugar como los desguaces en andalucia en los que encontrar todo lo que necesitas para tu coche.
Si ya has visto el vehículo que vas a comprar y sabes a ciencia cierta que está en perfectas condiciones asegúrate de que está al corriente de pago, es decir, que los impuestos estén al día así como que no tienen ningún embargo ni ninguna multa sin pagar, ya que de ser así es posible que acabe llegando a tu nombre con la considerable molestia que esto conlleva.
Si el coche es prácticamente tuyo, revisa las ruedas, los coches de segunda mano suelen estar revisados a fondo por el interior, pero los neumáticos suelen estar desgastados, es muy común en las ventas de vehículos de segunda mano pedir una rebaja del precio establecido para hacer la sustitución de los neumáticos, estos deben de tener un dibujo exacto en la cuatro ruedas y con una profundidad de un mínimo de 1,6 milímetros. Si tiene menos de esto es imprescindible cambiarlos. De esto dependerá la firmeza del vehículo la adherencia al asfalto y la seguridad en unas condiciones meteorológicas adversas, y no hace falta que haya una inundación para que el coche no se pegue al asfalto, si el dibujo está muy desgastado puede perder adherencia en un pequeño charco.